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huella

Millas de playas paradisíacas de arena blanca o dorada y aguas turquesas. Esta vista idílica se despliega para aquellos que disfrutan de sentir el sol y la brisa del mar y darse un refrescante chapuzón en las tranquilas y claras aguas. No hace falta viajar muy lejos para ver esta imagen de ensueño hacerse realidad todos los días del año. Se puede disfrutar en cualquier momento en Fuerteventura, a pocas horas de las principales ciudades europeas.

Playa a playa

Cerca de 150 kilómetros de playas de postal y un solo problema: ¿cuál debería ser? Un problema para el que existe una solución sencilla: cada día es diferente. Hoy una larga caminata por interminables campos de dunas, mañana un día de playa con toda la familia, donde hasta los más pequeños podrán disfrutar de un baño seguro en alguna de las lagunas cristalinas formadas entre bancos de arena y arrecifes naturales. Luego, al día siguiente, se vuelve un poco más aventurero en una de las playas salvajes y desiertas, escenario de grandes producciones cinematográficas, y más tarde puede tomar un viaje en barco a una pequeña isla donde le esperan momentos inolvidables...

Es la isla perfecta para viajar ligero y volver a casa relajado y renovado.

Jugando con el viento y las olas

El windsurf y el kitesurf son las disciplinas supremas de los deportes acuáticos en esta isla. Aficionados y profesionales del más alto nivel encontrarán en Fuerteventura unas condiciones inmejorables para surcar las olas y desafiar al viento, cualquier día del año.

Para aquellos que siempre han soñado con sentir la emoción de subirse a una tabla y lanzarse al mar, esta es la oportunidad perfecta. En la isla existen escuelas de surf y empresas especializadas que ofrecen todo lo necesario para practicar o iniciarse en estos deportes. Ofrecen un servicio profesional y de calidad basado en décadas de experiencia. Prueba de ello son los Campeonatos del Mundo de Windsurf y Kitesurf, que se celebran desde hace años en las hermosas playas de Jandía y atraen a la élite internacional.